Por: Arles Anderson Cortés Arroyo
Hace más de una década, Anderson Cortés, un adolescente natal de Barbacoas,
Nariño, se encontraba haciendo sus deberes escolares en la sala de su casa, cuando
Nubelly, su prima mayor, llegó acompañada por un joven muy delgado y alegre, y sus
cinco compañeros: Melissa, Lorena, Nilson, Vanessa y Esnaider, quienes de manera
empática y en confianza gritaban a aquel muchacho siempre flaco ... Rente, al parecer
era su sobrenombre, pero no era así como Anderson lo pensaba, al preguntarle a él,
salió de la duda al escuchar de su voz “ no, me llamo John Carlos Rentería Meza”, fue
entonces cuando este joven comprendió el porqué lo llamaban Rente.
A sus 29 años, Rente, como lo conocen todos en el pueblo de más de 35.000 habitantes en el casco urbano, ha mantenido su popularidad, y es gracias a que desde el año 2000, su mamá María Meza, decidió trasladarse hasta la cabecera municipal, para que sus tres hijos: Kevin, Tatiana y John Carlos (Rentería), continuaran sus estudios primarios y secundarios en uno de los dos colegios públicos existentes en la localidad.
En su familia, su mamá, cuando alguien llega a buscarlo por alguna tarea o proyecto comunitario, siempre y cuando se encuentre en casa, lo llama para venir a la puerta diciendo: “John..., John”, es de esa forma como se siente el calor hogareño que ha vivido el mejor Normalista Superior de la promoción 2012. Desde los primeros años de formación primaria, ya era un niño que se destacaba por su presentación personal, inquietud, destrezas y atención al servicio por las actividades dentro y fuera del aula de clases, así, lo comentó la maestra Sandra Vargas.
No fue un niño “gordo” al nacer, como pasa en la mayoría de casos de los
neonatos, pero se sabía que sería un infante sano y fuerte, lo dijo doña Amparo Realpe,
una de sus primeras vecinas con la que vivió separado solo por una pared de concreto y madera, la segunda, la del lado de su casa que tenía una vista majestuosa hacia el río Telembí, uno de los afluentes más importantes de la cuna del oro, que en tiempo de invierno alcanza un estimado de tres metros.
Rente, alguna vez tuvo que vivir una de las tantas inundaciones, en el año 2008,
después de pasar casi 12 horas sin servicio eléctrico, se pasó a vivir a solo un metro del
techo de zinc que cubría su humilde hogar, en ese espacio, organizó su cama y diseñó
una escalera con ocho pedazos de madera vieja, apenas tenía 18 años.
Él, sabía que debía trabajar arduamente para lograr grandes cosas en la vida, fue
así como en el año 2010, Adriana Ordoñez, su compañera de colegio, lo invitó para que
asistiera a la reunión dominical del grupo juvenil Tras las Huellas de Cristo, aquel
colectivo estaba dirigido por la Hermana Maritza Ortega, ella, se encantó al escucharlo
cantar, ese fue el primer puente para ser reconocido como uno de los cantantes
principales de la Iglesia Santa María de Barbacoas.
Si usted llega a visitar este hermoso pueblo, al preguntar por Rentería o Rente,
sabrá ubicarlo con facilidad. Aunque como dice Cindy su amiga: “él es un ser
perseverante, intelectual, amplio, porque siempre se proyecta, sin embargo, dirán que es
mala clase, porque obviamente no le caerá bien a todos. Él, es único, con sus errores y
defectos, lo queremos”, comentó.
Su trayectoria académica lo llevó a ganarse una beca en la Universidad Pontificia
Bolivariana con sede en Medellín, donde cursó el pregrado de Licenciatura en Ciencias
Sociales con énfasis en etnoeducación, graduándose con tesis meritoria junto a su
compañera Adriana.
Por más de cinco años, tuvieron que hacer viajes cada seis meses de Barbacoas
a Medellín, recorrido que comprende más de 24 horas por carretera.
Durante esa dinámica universitaria, fue visto por Eder Escobar Angulo, aspirante
a la Alcaldía municipal para el período 2016- 2019, como candidato para ocupar el cargo
de la dependencia de Cultura local, muchos conocidos se opusieron a su elección, como
fue el caso de don Pedro Tapia, sabedor y líder cultural, lo subestimó por ser un hombre
joven, lo que él no sabía es que Rente, estaba más preparado que un yogurt.
En Barbacoas, no es frecuente ver a un secretario durante los cuatro años de
gobierno en la Alcaldía, porque se manejan los favores políticos, Rente, fue la excepción,
porque desde el primer día puso los puntos sobre las ÍES. Lo que siempre le dio y le ha
dado fuerzas, es su ángel, su hermana Tatiana, que murió hace 8 años: “no fue fácil,
porque era la niña de mis ojos”, narró con la herida latente en su corazón.
El año anterior al finalizar su mandato, fue elegido como representante cultural de
la subregión del Telembí (unificación de los municipios de Roberto Payán (San José),
Magüí Payán y Barbacoas, por la cercanía), para ir a la Ciudad de México D. F
(México), a hacer un intercambio multicultural, gracias a la gestión realizada por
Mayruz Rincón, abogada y líder afrobarbacoana.
Rente, dice que “para mí, fue una experiencia significativa y maravillosa, porque
México es muy diferente a como lo muestran en los medios; hombres y mujeres de
novela, en realidad son personas diversas, se nota marcada la historia indígena, pero
nos parecemos en la manera cortés barbacoana a la hora de comunicarnos, un ejemplo
de ello (mande, que sería igual a dime, al interior de nuestro país).
Algo que le critican sus amigas, Adriana y Cindy, es el genio pesado que le nace
cuando se enoja por algo: “no hay nada que lo haga cambiar de parecer, o quizá las
gomitas, parece un niño cuando le regalan una”. Además, como todo barbacoano, le
encanta comer arroz con queso pastuso. Sin embargo, añaden que valoran de él que
“las cosas malas, las convierte en positivas”.
Los campesinos de las veredas de Ñambí, Telpí, el Kilómetro 18, entre otras, lo
recuerdan con mucho cariño, porque organizó la celebración de los 400 años del pueblo,
momento histórico que dejó en alto la cultura afrobarbacoana y Awá. También, porque
siempre ha estado presto para coger una canoa o carro, para ir y cantar en las correrías
(salidas sacerdotales a las veredas).
Hoy por hoy, es director de la Fundación Arcoíris, para el nodo de la subregión del
Telembí, la cual se enfoca en el análisis de la sexualidad y a su vez presta servicios de
atención a la población juvenil.
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